El Ayuntamiento de Fene aprobó esta mañana la modificación de las ordenanzas fiscales para el ejercicio del 2011. La mayoría de las tasas subirán el 2,1 %, el equivalente al incremento del Índice de Precios al Consumo. Incluyese en ese apartado el impuesto de la basura y el de circulación de vehículos. El impuesto de agua y alcantarillado permanece congelado, según aprobó el Pleno de la Corporación esta mañana. Votaron a favor los concejales del PSOE, en contra el Partido Popular, con la abstención del Bloque Nacionalista Gallego y de Izquierda Unida.
El edil de Hacienda, Rodríguez Carballeira, defendió la modificación de 17 ordenanzas fiscales de cara al año que viene, aplicándoles la subida del IPC, el 2,1%. La idea central es ir reduciendo el déficit de determinados servicios paulatinamente, pero teniendo en cuenta la situación de crisis actual, segundo afirmó. Bajo ese mismo criterio se congelan el impuesto del agua y saneamiento (hasta que no se aclare con la empresa concesionaria la situación real) y el de la ayuda en el hogar. El PSOE defendió asimismo no subir más aquellos servicios que, a pesar de ser deficitarios, son fundamentales para la calidad de vida de la vecindad, en clara alusión a las actividades culturales y deportivas.
El BNG se abstuvo en la votación, después de criticar el retraso con el que se presentaron al pleno y a falta de un estudio riguroso de cada una de las tasas e impuestos y de los servicios prestados, antes de formular a propuesta de modificación. El Bloque reclamaba una revisión en profundidad de cada una de las tasas para tender a equilibrar los ingresos y los gastos y también para eliminar anacronismos. Puso de ejemplo que hoy en día un vecino que tenga un coche ya no puede acceder, a pesar de estar desempleado, a la exención de las tasas.
Criticó el Bloque que tampoco se estudió la posibilidad del fraccionamiento de los pagos. Que el impuesto del agua quede congelado, significa para el BNG que en el futuro va a haber que subirla mucho. El equilibrio fiscal es fundamental, según el portavoz nacionalista, Manuel Polo.
El PP votó en contra. Los populares defendían este año la congelación de las tasas en vista de la situación de crisis. Gumersindo Galego criticó la situación del servicio del agua que continúa sin resolverse. Y comento el déficit del servicio de actividades culturales y deportivas afirmando que las escuelas cuestan al ayuntamiento de Fene 819.000 € mientras que recauda sólo 235.000. Una situación altamente deficitaria que Gallego dice que urge corregir porque se pierden 100 millones de las antiguas pesetas.
Izquierda Unida optó también por la abstención al no concordar totalmente con las soluciones técnicas que se dan en este tema. Proponía buscar nuevos modelos como por ejemplo compartir con otros municipios algunos servicios para abaratar costes. También apuesta por revisar las exenciones y actualizarlas sobre todo en tiempo de crisis. Manuel Sánchez, advertía que a veces no si suben los impuestos pero se rebaja la calidad y cantidad de los servicios públicos.
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