Arden electrodomésticos en Magalofes por un suministro eléctrico a 380 voltios

“As desgracias non veñen soas e os veciños de Magalofes parece que estamos olvidados da man de Deus”. Así se expresaba ayer por la noche uno de los afectados por el incidente ocurrido en esta parroquia fenesa cuando Fenosa suministró electricidad a una potencia de 380 voltios.
Fue a primeras horas de la noche cuando los vecinos de Magalofes tuvieron la, en principio, grata noticia de que se les restablecía la luz, después de cinco días a oscuras. De inmediato encendieron el diferencial de sus contadores y se vieron sorprendidos por una serie de explosiones en lámparas, frigoríficos, lavadoras, televisores, bombas del agua e incluso calefacciones.
Uno de los afectados pudo comprobar que el motivo no era otro que el de que la energía eléctrica que entraba en sus hogares estaba a 380 voltios, nada más y nada menos que 160 por encima de los 220 para los que están preparados los electrodomésticos.
El balance general de los daños ocasionados aún se desconoce, porque se volvieron a quedar sin luz, pero, por ejemplo, Javier Vidal González ya sabe que la bomba de su pozo no funciona y que una lámpara dejó un círculo negro en la mesilla.
Agustín García es otro de los afectados, aunque todavía no sabe el alcance de las averías. Desde su punto de vista, toda la situación resulta increíble en esta parroquia, “porque antes de que nos queimaran as lámparas e os electrodomésticos xa pasamos cinco días sin luz, tendo o lado do transformador de Fenosa un grupo electrógeno desde 15 días antes do temporal”. Según explicó, desde la compañía eléctrica se les indicó que el citado equipo era un transformador, por lo que no servía para dar electricidad.
Al parecer, ayer por la mañana pusieron un generador pequeño para darles servicio, pero a los cinco minutos paró de trabajar. Después, por la tarde, les conectaron a la red el que ya estaba allí, que fue el que provocó el desastre.
Todo esto ocurrió en torno a las siete de la tarde y los vecinos dieron cuenta de la situación a Unión Fenosa.
A las diez de la noche, un grupo de vecinos aún permanecía al lado del grupo electrógeno, en espera del personal de la compañía eléctrica.

Fuente: Diario de Ferrol