«Vengo de Cartagena en coche, pero me encanta»

Ejemplos de la devoción por el encaje de bolillos los había ayer por todas las esquinas en el pabellón de San Valentín. Quizá uno de los más válidos, sin desmerecer al resto, sea el de Fina García Jiménez. ¿Motivo? Ella lo aclara: «Salí el jueves con mi marido para venir aquí y el domingo a Pontevedra, a otro encuentro... Vengo de Cartagena en coche, pero me encanta».

Fina decidió meterse un puñado de kilómetros entre pecho y espalda para poder acudir a una cita «en la que se aprende mucho, las técnicas son parecidas a las del sur pero los dibujos con los que trabaja son distintos». Monitora de varias asociaciones en Cartagena, le llegó por carta una invitación del Centro de Promoción Social de San Valentín. Señala: «Ni me lo pensé, hemos venido y el año que viene si podemos repetimos». No es la primera vez que lo hace. En el 2008 estuvo en la reunión que se organiza en Neda y le gustó, como la de ayer, porque «las que hacemos en nuestra zona duran solo hasta la una del mediodía, luego la gente come y se va para sus casas, aquí se disfruta mucho más tiempo».
¿Cómo se ve el encaje gallego en su tierra? Afirma: «Fenomenal, tiene mucha fama por Camariñas pero también por reuniones como esta de Fene».

Fuente:La Voz de Galicia
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